MEDICINA A TODO TU CUERPO.


Proverbios cap. 3 vers. 5 – 8. Fíate de Jehová de todo tu corazón,
Y no te apoyes en tu propia prudencia.
Vers. 6. Reconócelo en todos tus caminos,
Y El enderezara tus veredas.
Vers. 7. No seas sabio en tu propia opinión;
Teme a Jehová, y apártate del mal,
Vers. 8. Porque será medicina a tu cuerpo,
Y refrigerio a tus huesos.

Estos versículos básicamente hablan de confiar en Dios en todas nuestras acciones, en cada decisión de cada DIA. Con una advertencia muy particular
“No seas sabio en tu propia opinión”, en un argentinismo “hace la tuya”, o “hacer lo que bien le parezca a uno”. Estimar nuestra opinión más que el consejo de Dios esto es una falencia muy habitual en el hijo/a de Dios. La Biblia llama a esto “concupiscencia”, que significa: “Yo creo, que lo que Yo pienso es mejor”.
Santiago. 1: 13. Cuando alguno es tentado, no diga que
Es tentado de parte de Dios; porque
Dios no puede ser tentado por el mal,
Ni El tienta a nadie;
Versa. 14. sino que cada uno es tentado, cuando
De su propia concupiscencia es atraído
Y seducido.
Versa. 15. Entonces la concupiscencia después que
Ha concebido, da a luz el pecado; y el
Pecado, siendo consumado, da a luz la
Muerte.
Versa. 16. Amados hermanos míos, no erréis.
Versa. 17. Toda buena dadiva y todo don perfecto
Desciende de lo alto, del Padre de las
Luces, en el cual no hay mudanza, ni
Sombra de variación.
Versa. 18. El de su voluntad, nos hizo nacer por la
Palabra de verdad, para que seamos
Primicias de sus criaturas.

Hay una profunda tendencia en la naturaleza humana a ser precisamente igual a lo que habitualmente se imagina ser, ignorando que lo que se va a ser, es aquello por lo cual crea hoy. Y en esto hay una decisión a tomar diariamente, si me voy a reflejar en la palabra escrita o me voy a reflejar en aquello que creo que me conviene (concupiscencia).
Esto va a determinar, la victoria o no de ese DIA.
En estos versículos esta la exhortación amorosa de Dios, como el sonido de una trompeta victoriosamente celestial:”AMADOS HERMANOS MIOS, NO ERREIS”.
La palabra de Dios nos ha dado un gran privilegio, su voluntad expresa para que seamos
“primicias de sus criaturas”, nosotros tenemos una gran responsabilidad, para con su voluntad, “CREERLA”.
Hoy en DIA yacen posos de habilidades espirituales, principalmente en las manifestaciones de impartir (FE, MILAGROS Y DONES DE SANIDAD), Dios nos alienta a perfeccionar y usar ese potencial para nuestro propio beneficio y el de toda la iglesia.

“LO UNICO QUE HACE FALTA PARA QUE LA INCREDULIDAD TRIUNFE, ES QUE
LOS CREYENTES NO HAGAN NADA”.